La mantequilla, por ejemplo, puede sustituirse por margarina o aceite de oliva que, a diferencia del aceite de maíz u otros granos adecuados para la preparación de platos dulces, otorga a las preparaciones saladas un sabor más robusto y característico.
Un gran sustituto del queso y el requesón es el queso de soja blando. Con el tofu, se pueden preparar rellenos para pasteles, empanadas, ravioles, canelones y lasaña, o utilizarlo en lugar de la mozzarella sobre la pizza. El tofu se puede comer crudo, tal vez sazonado con un poco de aceite de oliva virgen extra, especias o hierbas, o salteados con verduras. Al natural es ideal para enriquecer ensaladas mixtas y salsas.
Siendo particularmente rico en proteínas vegetales, el queso de soja puede también es un sustituto válido para la carne y se utiliza en la preparación de hamburguesas vegetales y croquetas. La alternativa más viable a la carne es quizás el seitán que se le parece tambipen en su aspecto. Es un alimento de origen vegetal con un alto contenido de proteínas derivadas del gluten de trigo ode la espelta. Como está pre-cocido, el seitán tiene tiempos de cocción más rápidos que la carne, es totalmente libre de colesterol y de fácil digestión. En las tiendas especializadas en alimentos orgánicos o naturales, el seitán está disponible en diferentes versiones: al natural, en cubos en fetas, atomatizado o ahumado.
Otro sustituto de la carne es el tempeh , un producto de origen oriental procedente de la fermentación de frijoles cocidos de soja. Combinado con otros cereales como arroz, cebada y trigo, se puede utilizar para preparar excelentes chuletas vegetales, salchichas, hamburguesss vegetales y otros platos salados similares, en textura, sabor y contenido de proteínas, a la carne.
Entinces, antes de torcer la nariz ... siempre es mejor probar para creer!
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