¿Se puede congelar la pasta fresca?

Preparar pasta fresca es un procedimiento largo y, por este motivo, es posible que deseemos preparar más de lo que se necesita para reutilizarla en el futuro pero... ¿se puede congelar la pasta fresca?

Por supuesto, sí, es un procedimiento que también se usa en muchas cocinas profesionales, que no degradan excesivamente el producto y permite tener una cocina más organizada y, sobre todo, cocinar los alimentos sin perder demasiado tiempo.

¿Cómo congelar la masa?

Si es pasta larga, se coloca la pasta en porciones formando nidos, -tal como viene la pasta seca al huevo- con una distancia de un par de centímetros entre un nido y otro. Se coloca todo en una bandeja para hornear cubierta previamente con papel pergamino y luego se lleva al freezer.

Es muy importante mantener la masa separada ya que esto evitará que se pegue y resulte inutilizable en el futuro.

Se espera aproximadamente 1 hora para que la pasta se congele bien y luego se pasa al siguiente punto. Recordar que solo se puede congelar la pasta cruda siguiendo este procedimiento. Se recomienda especialmente no congelar pasta ya cocida.

Poner los nidos ya congelados en una bolsa, cerrar todo con un nudo almacenar. La pasta estará lista para ser utilizada cuando lo deseemos, con una cocción que será idéntica a la de la pasta fresca.

¿Cómo cocinar pasta congelada?

Simplemente echarla en abundante agua salada que ya haya alcanzado el punto de ebullición. La masa se abrirá y comenzará a cocerse. ¿Cuánto tiempo puedo cocinarse? Cuando la masa comienza a flotar en la superficie ya se la puede retirar y drenar.

¿Qué hacer con la pasta corta?

El procedimiento para la pasta corta es también el de congelación abierta. Se acomoda el producto sobre una bandela sin encimarlo y con cierta distancia. Una vez congelado se coloca en bolsas biencerradas y se lleva al freezer.

Esto también se aplica a las hojas de masa generalmente utilizadas para la lasaña.

No congelar el bollo de masa

El bollo de masa preparda no debe congelarse. Incluso si luego procedemos a descongelarlo, sería extremadamente difícil trabajar. Así que es mejor estirar y cortar previamente y congelarla una vez que haya tomado el formato deseado.

Pasta rellena

También las pastas rellenas, como raviolis y tortellini, se pueden congelar siguiendo el mismo procedimiento. El relleno se cocinará bien y, una vez que la pasta elegida suba a la superficie, escurrir, condimentar y servir.