Reflujo gástrico: todo lo que hay que saber sobre este generalizado trastorno

¿Qué es y cómo contrarrestar el reflujo gástrico? ¿Y cómo comportarse en la mesa? Cómo reconocer los síntomas y cómo lidiar con esta dolencia, qué alimentos preferir y cuáles evitar.

1. Reflujo gástrico, qué es

Cada vez más personas en el mundo sufren de reflujo gastroesofágico: incluso, según un estudio reciente, en algunos países llega al 51% de la población, es decir, más de la mitad. ¿Qué es? Es un trastorno molesto porque implica el ascenso temporal y parcial del contenido del estómago hacia el esófago: incluso aunque a menudo no alcanza la regurgitación (como es frecuente en niños muy pequeños) sigue siendo una sensación desagradable. No solo eso, sino que también es peligroso porque puede degenerar en enfermedad por reflujo, que es una patología real caracterizada por lesiones en el esófago.

2. Las causas

¿Qué causa el reflujo gástrico?Hay una válvula que separa el estómago del esófago y que sirve precisamente para hacer que los alimentos vayan en una sola dirección: esta válvula puede funcionar mal, ya sea por sí misma o porque la presión abdominal es demasiada (generalmente cuando tenemos el estómago lleno porque hemos comido demasiado). Otras causas también pueden ser un vaciamiento gástrico lento, hernia hiatal, fumar cigarrillos, abuso de alcohol y medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (analgésicos sin cortisona como la aspirina).

3. Qué hacer

¿Cómo reducir esta dolencia? Obviamente, mucho está relacionado con la nutrición, pero no sólo. En el banquillo de los acusados, y por lo tanto a ser eliminados, están aquellos alimentos que causan una gran secreción de ácido, que disminuyen el tono de la válvula que separa el estómago del esófago y que ralentizan el vaciado gástrico.

4. Qué alimentos no

¿Alimentos a evitar? En primer lugar están los más exitantes, como el café y las gaseosas con cafeína, chocolate y cacao, salsas picantes, especias, en particular pimienta, guindilla, menta y clavo de olor. Luego están los alimentos grasos, que ralentizan la digestión y, por lo tanto, el vaciado del estómago: salchichas, quesos estacionados y fermentados, pescado y carnes grasas, papas fritas, crema, mantequilla, cremas, dulces, salsas elaboradas; y en la categoría también se deben incluir alimentos preenvasados, ya que a menudo son ricos en grasas. Lo mismo para la leche y el yogur entero.

Luego está la categoría de alimentos ácidos: por lo tanto, se deben evitar los jugos y exprimidos de cítricos, piña, tomate; no a las frutas ácidas y agrias, vinagre y limón. Los alimentos como la carne y el pescado en conserva, ahumado o salado también son problemáticos; ajo y cebolla y, por supuesto, alcohol y licores, así como bebidas gaseosas y batidos (porque crean aire en el estómago con la consiguiente relajación de la pared). En algunos casos, también, es bueno prestar atención a las verduras con mucha fibra (brócoli, alcachofas, col de col rizada, puerros, repollo) y a la cáscara de las legumbres, ya que pueden empeorar los síntomas del reflujo.

5. Cocciones y comportamientos a evitar

Pero no es solo lo que se come, también importa el cómo. Es importante evaluar los métodos de cocción, para facilitar el proceso digestivo. Por lo tanto, se debe evitar la carne cocida en exceso, las carnes estofadas o hervidas, las cocciones violentas (a la parrilla o asada), los huevos duros, los salteados y las papas fritas. Finalmente, el sobrepeso, entre los muchos problemas colaterales que pueden causar a la salud, también incluye esto: porque al causar presión en el estómago, los síntomas empeoran.

6. Qué comidas sí

Entonces, ¿qué se puede comer? Parece que no quedara nada. Pero los nutricionista aconsejan todos aquellos alimentos que no afectan el tono de la válvula que separa el estómago del esófago. Entre ellos están carbohidratos (pan, pasta, arroz, pero preferiblemente integrales) con condimentos y salsas ligeras. Patatas cocidas, huevos pasados por agua o escalfados. Galletas secas, preferiblemente integrales. Carnes blancas y pescado magro, cocinado con métodos simples (al vapor, en papel de aluminio). Quesos frescos bajos en grasa (ricotta, port salut y similares).

Entre las verduras, generalmente bien toleradas están las zanahorias, acelgas, espinacas, calabacines, judías verdes, pepinos, rúcula, apio. Preferiblemente leche descremada y yogurt bajo en grasa. Las legumbres? Mejor peladas (para quitar la cáscara) y harina de leguminosas. El aceite, es preferible que sea aceite de oliva virgen extra y se utilice crudo. Agua natural.

7. Algunos consejos de estilo de vida

También hay reglas de comportamiento, relacionadas con la nutrición: evitar las comidas abundantes y comer despacio, masticando con cuidado. Beber en pequeños sorbos, agua corriente, preferiblemente entre comidas. Evitar las comidas y bebidas demasiado calientes o frías. Comer al menos 3 horas antes de acostarse. El ejercicio y la posición supina tampoco se recomiendan después de las comidas: por lo tanto, no salir a correr después de la cena, ni siquiera acostarse en el sofá. En los peores casos, puede ser bueno tratar de levantar la cabecera de la cama unos veinte centímetros, mientras que durante el día es mejor no usar cinturones y ropa ajustados. Fumar, no hace falta decirlo, nunca.