Quien dice que para estar delgados, mantener una buena figura y estar saludables, hay que dejar de comer. En realidad se trata de alimentarse con comidas sanas, servidas en porciones correctas y degustadas en los momentos indicados.
Podemos encontrar varios tipos de alimentos que además de ayudar a mantener el peso ideal, proporciona todos los nutrientes que se necesitan y nos dejaran saciados por varias horas.
Existe una enorme variedad de platillos preparados con verduras, alimentos bajos en calorías y libres de grasas.
Cuentan con muchas vitaminas, minerales y antioxidantes. Mucha gente prefiere comerlas crudas en ensaladas, para conseguir el máximo de sus propiedades. Los palitos de zanahorias, unos tomates cortados en rodajas y hasta los champiñones son buenos ejemplos de alimentos más que saludables y que ayudan a adelgazar.
Otra excelente alternativa son los granos enteros, ricos en vitaminas e hidratos de carbono. Cuentan también con mucha fibra que mejora la digestión y la absorción de nutrientes.
La fibra es excelente para quitar el hambre y para mantenernos llenos, lo que evitará que se siga comiendo.
Podemos encontrar esta clase de granos en algunos cereales, y hasta en galletas y palomitas de maíz que sean bajos en azúcar y en grasas.
Las frutas secas aportan altas cantidades de omega 3, un ácido graso muy importante para el buen funcionamiento del organismo. La mayoría de estos frutos también generan saciedad, por lo que con una porción de nueces o almendras, se puede tener el perfecto aperitivo para disfrutar entre comidas.
Las frutas son consideradas los dulces más saludables que se pueden conseguir, son alimentos muy naturales y cada uno ofrece una serie de vitaminas muy importantes para el organismo. No contienen grasas y sus sabores son exquisitos. Los especialistas recomiendan consumir cinco porciones de frutas al día, y resulta muy conveniente comerlas en ensaladas y hasta pueden combinarse con algunas verduras.
Y para quitar la sed, no hay nada mejor como el agua, que además de ello, ayuda a mantener una piel hidratada y con una mejor apariencia. Los batidos de frutas y verduras también pueden considerarse, sobre todo aquellos que se hacen sin azúcar y se toman por las mañanas.
Para quienes se ejercitan en el gimnasio y tienen un entrenamiento de moderado a fuerte, lo mejor es tomar bebidas rehidratantes que puedan proporcionarles las sales perdidas. Pero para quienes hacen ejercicio regular y de bajo impacto, el agua es lo mejor.
En caso de querer consumir otras bebidas, se puede optar por el té, el café descafeinado, o la leche de arroz.
Podemos encontrar varios zumos naturales que son depurativos y que también ayudan en el buen funcionamiento de la salud, además de mantener el peso correcto.
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