Es importante confiar en la calidad de los alimentos y preferir aquellos que tienen características saludables.
En la mesa hay aliados del bienestar que no debe subestimarse: especias, omega3, vegetales y harinas integrales son sólo algunos de ellos.
El simple hecho de comer influye positivamente en la actividad cognitiva, probablemente mediante la estimulación del nervio vago: hacer varias comidas pequeñas durante el día es bueno para nuestra cerebro, dicen los expertos. Por supuesto, también es importante lo que elijamos para comer: algunos estudios, por ejemplo, han demostrado que una dieta mediterránea tiene efectos positivos sobre el humor.
La evidencia más convincente de sus efectos beneficiosos están relacionadas con la asunción de Omega 3, grasas contenidas en los peces (consumidos preferentemente hervidos o al vapor), que parecen ser capaces de estimular la neurogénesis cerebral, es decir, la producción de nuevas células en el cerebro; también se ha demostrado que existe una correlación entre el consumo de pescado y tasas de depresión.
Además del Omega 3, también las especias contribuyen al bienestar psicológico, especialmente el curry.
Los flavonoides encontrados en el té verde, chocolate oscuro, el cacao y el vino (que también contiene resveratrol) estimulan las capacidades cognitivas.
Para proteger al cerebro del envejecimiento, hay que incorporar vitaminas D, C y E. Cabe señalar, finalmente, que incluso algunas hierbas como la menta y la salvia han demostrado propiedades positivas para el funcionamiento cognitivo.
En general, el exceso debe ser evitado, y para aprovechar el efecto beneficioso de la comida en el cerebro, la adición de ejercicio regular definitivamente ayuda.
¿Qué alimentos no deben faltar en nuestra mesa?
Entre las frutas y verduras hay que privilegiar espárragos, aguacates, espinacas y nueces, que proporcionan un alto aporte de vitamina E, ayudan a prevenir el envejecimiento prematuro de las membranas celulares.
También es importante el consumo de limones, naranjas y zanahorias, porque su vitamina C promueve la prevención de trastornos cardiovasculares, a menudo relacionados con problemas de ansiedad y estrés.
El pescado azul y los mariscos, como ya se mencionó, son ricos en Omega 3, que previene trastornos del estado de ánimo y mejora el tratamiento de la disfunción cerebral de origen orgánico.
También impotante en los pescados grasos, así como en los hongos, la leche y los cereales, es el contenido de vitamina D: algunos estudios han encontrado una asociación entre el déficit de esta vitamina y la aparición de muchos trastornos psiquiátricos, como depresión, esquizofrenia y trastorno bipolar.
Por último, entre las especias se debe preferir el curry que tiene propiedades antioxidantes para el cerebro; importante es también el azafrán.
Otras hierbas muy apreciados y útiles en la mesa son la albahaca, el orégano y el romero.
Comer bien aporta energía positiva al organismo y evita el exceso de estrés en el cerebro, permitiendo afrontar el día con más energía y en un estado de mayor bienestar general.
Buenos hábitos que ayudar también a mantener a la línea:
- Nunca ir de compras sin una lista, para evitar comprar lo que no se necesita;
- poner la mesa con cuidado y creatividad (la vista también es importante);
- comer sentado en un lugar cómodo y confortable que permita disfrutar de la comid;
- consumes de tres a cinco comidas al día, tratando de interpretar el estímulo del hambre;
- comer lentamente (el cerebro registra la sensación de saciedad después quince minutos);
- siempre darse algún gusto: comer con placer es esencial y legítimo.
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