Muchas personas no tienen tiempo de tomar un buen desayuno y el almuerzo lo acaban en 10 minutos. Sin embargo, la noche les queda grande al igual que las horas, por lo que no dudan en comer grandes porciones de productos que no son para nada sugeridos.
Comer de noche resulta tremendo para quienes son tendientes a subir de peso, pero otra buena cantidad de personas, no se ve afectada en nada.
Debido a que en la noche se realizan menos actividades físicas, resulta mejor servirse raciones no muy grandes, debido que durante el sueño, el cuerpo utiliza menos energía.
Lo mejor para comer a estas horas es el yogur bajo en azúcar y en grasa con un par de cucharadas de granola o fruta.
En realidad en la noche puede comerse cualquier tipo de fruta, sobre todo aquellas que son suaves, peo hay que evitar llenarse porque la pesadez puede evitar que se duerma bien y en nada ayudara si lo que se quiere es perder peso.
Las palomitas de maíz son temidas por muchos, pero lo que pocos saben es que es un alimento con muy poco contenido de grasa y una alta cantidad de fibra que ayuda el tránsito intestinal mientras se duerme. Además, su contenido de hidratos de carbono mejora la digestión.
La leche ayuda a dormir a los bebes y también a los adultos. Por eso para mantenerse en forma y dormir relajado como un pequeño, que mejor que tomar un vaso de leche caliente antes de ir a la cama.
Por otro lado, no está de más saber cuáles son los alimentos que no deben consumirse por las noches, como las grasas, dulces o comidas excesivas ya que el cuerpo tendrá que hacer un mayor trabajo para digerir la comida.
Tampoco es conveniente comer muy cerca de la hora de dormir y evitar productos que contengan cafeína o teína.
Los bocadillos no son los más recomendados sobre todo si es sensible a la ingesta de carbohidratos, ya que no los asimilan correctamente.
Muchos creen que las cenas ligeras a base de ensaladas son de lo mejor, pero en este caso no hay que pensar en incluir lechuga ya que es muy indigesto, provocando gases e hinchazón abdominal por la noche.
El ajo y la cebolla también resultan inconvenientes ya que producen sensación de quemazón en el estómago, siendo bastante indigestos. Y ni que pensar en las pastas, el arroz y las pizzas, alimentos que por la noche no son nada fácil de digerir.
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