Así como el té puede encontrarse verde, negro, rojo o blanco, ahora el café se suma a la lista de bebidas caracterizada por los colores.
De ellos, se conoce el café verde, un tipo de café sin tostar que para muchos es desconocido ya que su venta y distribución no es muy popular.
Sin embargo, se le han encontrado muchos beneficios y hasta virtudes terapéuticas.
Si bien el café al consumirse en cantidades grandes, puede provocar efectos no deseados, muchas de sus variedades han sido mejoradas como el café verde que se ha convertido en uno de los más apreciados por su aroma y gusto único.
Propiedades y beneficios del café verde para la salud
El café verde no es un café torrefacto, por lo cual todos sus principios activos se preservan. Entre sus compuestos destacan la cafeína, el kahweol y el cafestol, moléculas que intervienen en el funcionamiento del sistema digestivo y en la secreción de la encima GST.
Otro de sus componentes es el ácido clorogénico, un antioxidante muy potente con múltiples funciones.
Se ha comprobado que el café verde estimula la actividad intelectual y ayuda en la concentración, disminuye la sensación de cansancio y ejerce acciones sobre el sistema digestivo además, de ser muy eficaz para combatir la sobrecarga ponderal.
El café verde es un gran antioxidante y un depurativo bastante eficaz y algunas investigaciones realizadas indican que el ácido clorogénico que contiene, permite reducir la grasa que se contiene en el cuerpo, lo que ayuda a disminuir la absorción de azúcar en el sistema digestivo, acelerando el metabolismo de las grasas.
Se pueden llegar a perder dos kilos al mes, consumiendo unos 30 gramos de café verde al día y combinando con una buena alimentación y ejercicios para adelgazar. Esa cantidad es suficiente para prevenir enfermedades cardiacas, obesidad, diabetes y transito lento. Las fibras que provienen de algas y legumbres son solubles y producen sensación de saciedad.
Resulta también, ser una bebida muy adecuada para quienes padecen de diabetes ya que el ácido clorogénico que contiene, favorece la respuesta a la insulina.
Si bien es una bebida muy beneficiosa para la salud, no se recomienda su consumo a las mujeres gestantes o para quienes están dando de lactar, con dos tazas de este café al día, es más que suficiente.
En cuanto a su sabor, este café es mucho más amargo que el café negro y su aroma menos intenso ya que no ha sido tostado.
Comentarios sobre este artículo (0)