Cómo almacenar las sobras de forma segura

Las sobras de la comida nunca deben desperdiciarse: existen infinidad de recetas para aprovecharlas, transformalrlas y reciclarlas. Hoy, sin embargo, queremos darle algunas sugerencias sobre cómo guardar las sobras de forma segura.

Veamos algunos consejos para conservar los alimentos de forma sana y comer bien, evitando el desperdicio de comiday , especialmente, el riesgo de infecciones.

Como conservar las sobras en el refrigerador

Una vez que el alimento ha sido cocinado, debe ser colocado en el refrigerador o congelados dentro de las siguientes dos horas; después de este tiempo (sólo una hora en verano) la comida, a temperatura ambiente, puede desarrollar bacterias que pueden ser peligrosas. Siempre utilizar utensilios y las manos limpias, y asegurarse de que la comida nunca está en contacto con superficies sucias.

Recipientes para conservar las sobras

Las sobras se deben almacenar en recipientes limpios y no deben almacenarse en el mismo recipiente en el que se cocinaron o sirvieron.

Divida las sobras de comida en pequeñas porciones y, antes de congelarlas, colóquelas en contenedores de no más de 5 cm de profundidad, para que se enfrían más rápido. Tarte de no enfriar los sobrantes en el mostrador de la cocina. Mezclar la comida con una cuchara puede acelerar el enfriamiento, inmediatamente después, cierre y refrigere.

Para permitir un enfriamiento rápido y uniforme en el interior del refrigerador o congelador, deje espacio para la circulación del aire alrededor del envase. Se recomienda consumir las sobras dentro de dos días, aunque algunos productos pueden ser seguro después de 3-5 días: cuanto más tiempo se mantiene un alimento cocinado, mayor es el riesgo de intoxicación alimentaria.

Conservar las sobras en el freezer

Si decide congelar las sobras, éstas deben estar perfectamente frías, a fin de mantener la estructura de los alimentos.

Para descongelar, se puede utilizar la nevera, agua caliente o el microondas. La primera manera es la más segura ya que permite una descongelación lenta.

Si tiene prisa puedes poner la comida en una bolsa de plástico sellada y sumergirla en agua tibia, cambiando el agua cada treinta minutos.

Calentar las sobras

Siempre llevar a ebullición salsas, guisos y sopas que hayan sido congelados; otros alimentos pueden calentarse a alrededor de 75° C, mezclando para que el calentamiento sea uniforme y llegue a la mesa caliente.

Importante: no vuelva a calentar la comida más de una vez ni mezcle las sobras con comida fresca.