Comer para vivir sin colesterol malo

El malo puede causar enfermedades cardiacas y accidentes cerebrovasculares, pero si se conocen y consumen ciertos alimentos, se puede disminuir el LDL del cuerpo y aumentar el bueno.

La mayoría de personas consume grasas en exceso perjudicando su salud, las grasas Trans aumentan el colesterol malo, pero las grasas polinsaturadas y las mono insaturadas ayudan a que se reduzca.

Por ello se recomienda consumir pescados como caballa, sardina, salmón y el atún blanco que contienen gran cantidad de cierto tipo de grasas polinsaturadas llamadas ácidos grasos omega 3. El pescado ayuda a bajar los triglicéridos y disminuye el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas.

Se debe consumir pescado dos veces por semana.

Los aceites vegetales como el de oliva, aceite de canola y girasol contienen muchas grasas insaturadas solubles, mientras que aceites como el de soya, maíz y cártamo son ricos en grasas polinsaturadas.

Las nueces, almendras y demás frutos secos son alimentos con mucho contenido de grasas mono insaturadas, ayudando a aumentar el colesterol bueno o HDL.

De igual forma la palta o aguacate puede ser un excelente aderezo lleno de grasas mono insaturadas y que puede mezclarse con un poco de aceite de oliva.

La fibra soluble también ayuda a eliminar el colesterol malo del cuerpo manteniéndolo alejado de los vasos sanguíneos. Los especialistas recomiendan consumir entre 5 y 10 gramos de fibra soluble por día para ayudar a reducir los niveles de LDL.

Estos los encontramos en la avena, también se encuentra en la cebada que puede servirse como guarnición en lugar de arroz o agregarse a las sopas.

Las frutas como manzanas, naranjas y fresas pueden agregarse a las ensaladas o comerse en trozos como refrigerio. Las semillas, frijoles y los chicharos secos, son productos que pueden consumirse una o dos veces por semana.
Existen también alimentos que contienen esteroles y estanoles vegetales añadidos, es decir sustancias derivadas de ciertos alimentos como la soya y el maíz y que van a impedir que el organismo absorba el colesterol.

Investigaciones realizadas han comprobado que consumir entre 2 y 3 gramos de esteroles o estanoles todos los días ayudan a reducir los niveles del colesterol hasta en un 15%. Los esteroles y estanoles adicionales pueden encontrarse en los jugos como el de naranja, en la leche y el yogurt; en la margarina, en el pan y en los cereales.

Comentarios sobre este artículo (0)

No hay comentarios