Alimentos que provocan migrañas y qué hacer para evitarlas

Muchas personas sufren de fuertes migrañas que se convierten en un sufrimiento constante, ya que los dolores de cabeza impiden que uno pueda continuar con sus quehaceres de manera normal.

Puede ser que desconozcamos las causas que provocan este malestar. A veces puede ser algo hereditario, aparecer cuando nos encontramos en situaciones de fuerte estrés, tristes, enojados, o llenos de problemas.

Sin embargo, puede deberse al consumo de ciertos alimentos que, según investigaciones, serían los causantes de las migrañas. Resulta bien saber cuáles son para evitarlos y acabar con este fuerte dolor.

Puede ser que estos alimentos al mezclarse con determinadas situaciones de estrés o desequilibrios hormonales, causen migrañas y un gran malestar.

De estos alimentos, se dice que el chocolate y un alto consumo de grasas pueden ser responsables, sobre todo en las féminas cuando están pasando por fuertes etapas de estrés o cambios hormonales.

La cafeína también pude producir migrañas, por lo que se recomienda elegir las que no lo contengan. Al igual que el chocolate, le vino tinto contiene un aminoácido llamado tiramina y una sustancia conocida como fenoles, que al parecer podrían causar migrañas.

Justamente, la tiramina disminuye la serotonina del cerebro, haciendo que los vasos sanguíneos se dilaten y se produzca la migraña. Este se encuentra en casi todas las bebidas alcohólicas como el vino tinto y en las cervezas.

Se cree también que algunos tipos de carne como la de cerdo, la carne de venado y algunas procesadas causan dolores de cabeza, por lo que su consumo debe reducirse.

Los aguacates, plátanos maduros, los frutos secos como las nueces y algunas semillas también podrían provocar molestias, así como los quesos curados y los alimentos a base de soja.

Para evitar este molesto dolor, lo mejor es comer frutas y verduras crudas, comer cereales integrales, endulzar los jugos y bebidas con miel o azúcar integral. Incluir almendras que resultan analgésicas y tener una dieta simple que no recargue el hígado.

Se recomienda además, beber dos tazas de una infusión a base de jengibre con una cucharada de corteza de sauce y la mitad de cucharadita de anís.

El jugo de limón exprimido y diluido en agua tibia bebido lentamente, también es de mucha ayuda.