Alimentos antiinflamatorios para sentirse mejor

¿Cansado y desconcentrado? La razón puede ser una dieta baja en alimentos antiinflamatorios. Son aquellos que contienen sustancias antioxidantes que también contrarrestan trastornos como este. La inflamación es una respuesta natural de nuestro organismo a estímulos externos que pueden ser, por ejemplo, virus o bacterias. Es un proceso que se produce de forma continua y que es crucial para el funcionamiento de nuestro organismo. Lo que marca la diferencia es el tipo de inflamación: puede ser aguda y temporal, o crónica y por tanto latente, manifestándose con dolencias a las que se les da poco peso, como el cansancio, pero también la acidez intestinal. Síntomas que, sin embargo, a la larga exponen al riesgo de enfermedades como diabetes, cáncer, enfermedades cardiovasculares, incluso también enfermedades autoinmunes.

¿Qué son los alimentos antiinflamatorios?

Por tanto, los alimentos antiinflamatorios son útiles en la prevención. Actúan contrarrestando los radicales libres y las citocinas, moléculas presentes naturalmente en nuestro organismo que, sin embargo, en exceso dañan los tejidos sanos, existiendo diversas patologías y trastornos vinculados o exacerbados por una mala alimentación.

¿Cuáles son los ingredientes antiinflamatorios?

¿Qué comer entonces? En definitiva, la regla es siempre la misma: seguir una dieta predominantemente vegetal, favoreciendo determinadas categorías de alimentos: en primer lugar, las frutas y verduras, ricas en fibra que ayudan a limpiar el intestino, luego las semillas oleaginosas y los frutos secos, que son buenos ácidos grasos que hacen bien para el corazón, y luego las legumbres como principal fuente de proteínas.

Estos alimentos deben constituir el 50% del plato en cada comida, y que es igualmente fundamental variar. Comer colorido es otra regla: cada alimento debe su color a ciertos principios nutricionales.

¿Qué son los alimentos inflamatorios?

Sin embargo, una dieta antiinflamatoria no significa vegana: lo ideal es que sea de origen vegetal, pero se pueden alternar las fuentes de proteínas: pescado tres veces por semana, huevos dos veces, lácteos dos veces y finalmente carnes blancas. Las carnes rojas, de hecho, son uno de los alimentos que tienen el efecto contrario: favorecen el efecto oxidativo que provoca la inflamación. Así como azúcares simples y aditivos presentes en productos procesados. ¿Debemos renunciar a ellos, entonces? No, mejor comerlos de vez en cuando, intentando variar mientras tanto: seguir una dieta antiinflamatoria siempre es agradable: puede ser una oportunidad para probar alternativas distintas.

Qué comer para desinflamar rápidamente el intestino

¿Qué comer, por ejemplo, en caso de reflujo o acidez de estómago? En este caso es mejor saber qué no comer, también porque determinados alimentos dependen mucho de la sensibilidad personal. Por ejemplo, a una persona cólica le puede molestar el brócoli y la coliflor, mientras que a quien padece gastritis le puede afectar un exceso de tomates en su dieta. Es importante saber escucharse.

Alimentos antiinflamatorios para el cerebro

Aquí también necesitas saber qué es bueno y qué no. Cuando nos sentimos cansados ​​y poco concentrados, por ejemplo, pensamos que se debe a una baja de los niveles de azúcar, por eso tendemos a comer dulces, pero nos sentimos aún más cansados ​​debido al pico de glucemia y a la sobreproducción de insulina. ¿La alternativa? Alimentos ricos en Omega 3 que son útiles para el buen funcionamiento del cerebro, y fibra integral, que sacian durante mucho tiempo y dan energía.

Que comer para aliviar el dolor en las articulaciones

¿Otro cliché? Come carne cuando tengas problemas en las articulaciones. Mucha gente lo hace, convencida de que así podrá incorporar una cantidad de colágeno. Pero esto no es cierto porque el colágeno se produce independientemente de la carne si se sigue una dieta que asegure todos los aminoácidos esenciales. ¿Un ejemplo? La combinación de cereales y legumbres.

Que beber contra la inflamación

Último consejo: beber. El agua es la principal fuente de nuestros líquidos y la hidratación permite al organismo defenderse. Un cuerpo deshidratado entra en alarma. Para beber más, prueba con infusiones o aromatizando el agua. Y sobre todo, recuerda que lo que importa es un estilo de vida saludable: una buena alimentación y una actividad física regular siguen siendo la mejor combinación para la prevención.