Si crees que es mejor lavar la comida fresca antes de cocinarla, para protegerte de las bacterias, podrías estar equivocado. Las frutas y verduras deben lavarse cuidadosamente bajo el agua para eliminar los pesticidas, la tierra y el polvo; pero en el caso de otros alimentos, se debe proceder directamente a cocinarlo. Veamos de inmediato por qué y cuáles son.
1 Carne y pescado
Lavar carnes y pescados crudos antes de cocinarlos no solo no elimina las bacterias alimenticias o los patógenos, sino que en algunos casos puede incluso aumentar el riesgo de contaminación. Al hacerlo, las bacterias se propagan en la piel y en toda la cocina, en los diferentes estantes e incluso en encimera, a través de grietas y goteos. Distintas investigaciones han demostrado que las bacterias pueden alcanzar las superficies hasta casi un metro de distancia. La única forma de neutralizarlas realmente coincide con el proceso de cocción, siempre que alcance al menos 165 ° C. Muy importante es lavarse las manos después de tocar estos alimentos. También se debe decir que al lavar la carne y el pescado se agrega humedad que luego creará vapor y afectará negativamente el sabor.
2 Setas
Las setas absorben agua como una esponja, perdiendo gran parte de su sabor y consistencia. Ergo, no hay que lavarlos. Esto, sin embargo, no significa que no se deban limpiar: utilizar un cuchillo con una hoja lisa para eliminar la superficie recubierta de tierra, raspando suavemente. El segundo paso consiste en frotar la superficie de la seta con un paño húmedo. Finalmente, es necesario separar el tallo de la tapa y también raspar la parte interna de la tapa.
3 Huevos
Tampoco los huevos deben ser lavados: se arriesga a perder la película que cubre la cáscara, una verdadera barrera que protege tanto la clara como la yema de los microorganismos. Los huevos que se compran en el supermercado están bien tal como están. A diferencia del caso de los huevos recién depuestos, o directamente recogidos en el campo, que inevitablemente están sucios con barro, plumas, excremento de pollo. Que hacer? Hay que lavarlos en seco, frotando suavemente la cáscara con un estropajo o con papel de lija, lana de acero de grano muy fino o con un cepillo.
4 Pasta
Algunas personas creen que, para preparar ensaladas frías de pasta, esta última debe pasar rápidamente bajo el chorro de agua fría. Cada uno tiene sus propios gustos, pero hay que tener en cuenta que que la masa pierde su humedad y, en consecuencia, su sabor (además de adquirir un aspecto desconcertante). Mejor drenarla, comenzar a enfriarla, añadir unos minutos más tarde un poco de aceite de oliva para que no se pegue y luego seguir adelante con el condimento elegido.
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