Cada receta se puede personalizar y reinventar según los gustos personales: un solo plato puede cambiar completamente de sabor dependiendo de los condimentos.
Eligiendo buenas materias primas, se obtendrán platos sabrosos, pero hay que intervenir para aromatizarlos y no necesariamente recurrir a la sal, que no es buena para la salud y corre el riesgo de tapar los sabores si se utiliza en grandes cantidades.
Las especias y los perfumes juegan a favor y se pueden encontrar en cualquier tipo de ellos en los lineales del supermercado, ¡o plantarlos en el balcón o en macetas para tenerlos a mano y usarlos en las comidas!
Aquí se sugieren los aromas que no pueden faltar en la despensa y que harán que los platos sean sabrosos y saludables.
1. Albahaca
Sus hojas de color verde vivo y ligeramente crujientes recuerdan inmediatamente los perfumes y sabores típicos de la cocina italiana hasta el punto de que se ha convertido en la hierba aromática por excelencia. Compra un plantín para tener en maceta o la seca en tarros.
Perfecta en ensaladas y acompañada con tomates frescos, poner unas hojas en salsas o utilizarla para condimentar verduras al horno o a la plancha, y si sobra un poco, hacer un buen pesto.
2. Cebollino
Son arbustos pequeños, largos y delgados, que se pueden plantar en macetas y permanecen turgentes y brillantes durante mucho tiempo: esta hierba tiene un sabor particular que recuerda el sabor picante del ajo y el dulzor de la cebolla.
Cortarlo fino y usarlo crudo para condimentar platos de pescado, perfecto para salmón marinado, pero también huevos y tortillas, carnes a la parrilla, salsas y sopas; si se quiere un sabor picante y particular, usarlo en las ensaladas.
3. Romero
El fresco es excelente, basta con plantar un pequeño arbusto para tener rápidamente una gran cantidad, pero el seco también va bien en la cocina ya que tiene un sabor un poco más fuerte: tenerlo en cuenta al usarlo y ser menos generoso.
Las acículas de esta planta dan lo mejor de sí con carnes y pescados, en general con asados donde se utilizan para marinar y cocinar, pero también son perfectas para condimentar pan, patatas, verduras, risottos y sopas.
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