Pancitos saborizados

Cómo hacer Pancitos saborizados

Preparar la masa con levadura. Disolver la levadura en un poco de agua tibia, juntar las dos harinas y después de mezclarlas, agregar el aceite y el agua con la levadura. Empezar a trabajar incorporando el resto del agua, las cucharadas de puré de tomates y finalmente la sal. Amasar mucho y enérgicamente hasta que la masa esté bien amalgamada, lisa y suave. Formar una bola y espolvorear con harina.

Transfiera la bola de masa a un tazón grande enharinado y dejarla crecer durante unas dos horas, hasta que se duplique.

Mientras tanto, cortar las cebollas en rodajas y rehogarlas en una sartén grande con un chorrito de aceite. Cuando la cebolla empiece a dorarse, añadir los tomates picados gruesos, las alcaparras (previamente desaladas en agua y exprimidas), una pizca de orégano, una pizca de chile picnte y una pizca de sal.

Revolver bien, luego bajar el fuego y dejar que se cocine durante unos 15 minutos, hasta que el exceso de líquido se haya secado. Retirar la salsa del fuego, transferirla a un bol y una vez que se haya enfriado, agregar las aceitunas cortadas en rodajas. Dejar que se enfríe.

Cuando la masa haya doblado, desinflarla ligeramente y agregar el aderezo preparado. Amasar con las manos para incorporarlo lo mejor posible.

Tomar porciones de la masa y colocarlas en una placa de horno, cubiertas con el papel apropiado, un poco separadas. Espolvorearlos con sémola y hornear, en horno precalentado a 200°, en la parte superior y en modo ventilado. Cocinar durante 35-40 minutos.

Retirar los pancitos del horno y servir tibios o a temperatura ambiente.