Harina de maíz

Obtenida de la molienda del maíz, esta harina de grano grueso llegó a Europa tras el descubrimiento de América, donde es un cultivo tradicional de los pueblos originarios e ingrediente fundamental de las cocinas de Colombia, México, Perú, Ecuador y Venezuela.

Existen diversas variedades de harina de maíz entre ellas:

- Harina de maíz precocida: el maíz se cuece antes de molerlo. Es la más popular por su practicidad a la hora de cocinarla. En Venezuela se le conoce como Harina PAN en sus variedades blanca y amarilla según el color del maíz con la que se elabore.

- Harina maíz pelado: se hierve el maíz desgranado con cal, para despojarlo de su cáscara.

- Harina maíz pilado: se muele el maíz aún crudo y se cuece después.

- Harina maíz tostado: se tuesta el maíz antes de molerlo.

- Frangollo: es una harina gruesa utilizada en las Canarias para elaborar un postre del mismo nombre.

El valor nutritivo del maíz es algo inferior al del trigo y su harina no es panificable (por lo que en su estado puro es apta para celíaos), pero mezclada con harina de trigo permite elaborar ricos panes.

En todo el mundo es utilizada para preparar distintos platos típicos; así, en Europa, además de la famosa polenta del norte de Italia, existen otros platos como el malai, una torta dulce, enriquecida con pasas de uva de la cocina rumana; el Arapash or Harapash de Albania o el boroña , pan relleno de embutido elaborado en Asturias.

En Sudamérica y América Central, la harina de maíz se utiliza para preparar tortillas, mientras que arepas, hallaquitas, empanadas, cachapas, hallacas y mazamorras, son típicas de Colombia y Venezuela. Los tamales, las tortilla para tacos, las quesadillas, las tostadas, la sopa Azteca, y el Pozol (bebida a base de cacao y maíz de origen mesoamericano), son platos que utilizan harina de maíz en la cocina mexicana.

Así también, existen muchas preparaciones típicas en las cocinas de África y América del Norte.

Conservación

Para evitar que en la harina se formen larvas de insectos el método más seguro es guardarla en un lugar seco y oscuro lejos de la luz solar directa y fuentes de calor. Otro método es mantenerla envasada al vacío. La presencia de gorgojos en el paquete es un signo de una posible formación de moho, debido ala humedad excesiva. El olor de la harina debe ser el típico del maíz y la presencia de grumos indica un producto defectuoso.

Información nutricional por 100 gr.

Energía:  343 Kcal
Proteínas:  8.3 g.
Hidratos de carbono:  66.3 g.
Fibra:  9.4 g.
Lípidos:  2.8 g.
Colesterol:  0 mg.
AGP (Ácidos grasos poliinsaturados):  1.4 g.
AGS (Ácidos grasos saturados):  0.35 g.
AGM (Ácidos grasos monosaturados):  0.88 g.
Vitamina A:  50 µg.
Vitamina B1:  0.44 mg.
Vitamina B2:  0.13 mg.
Vitamina B6:  0.06 mg.
Calcio:  18 mg.
Sodio:  0.7 mg.
Ácido fólico:  10 µg.
Yodo:  80 µg.
Potasio:  120 mg.
Fósforo:  39 mg.