Brócoli

El brécol, bróculi o brócoli (Brassica oleracea italica), del latín brachium (brazo), es una planta de la familia de las Brasicáceas, antes llamadas Crucíferas. Es originario de la zona comprendida entre Grecia, Turquía, Siria y la isla de Chipre. Ya en la época de los romanos era muy consumido y apreciado.

En efecto, los romanos lo comían crudo, antes de los banquetes, para ayudar al cuerpo a absorber mejor el alcohol, costumbre que aún se practica en los países del Este para neutralizar los efectos del consumo excesivo de vodka. Era un alimento base en las tripulaciones de los buques para compensar una dieta muy pobre durante las largas travesías.

El brócoli, bajo en calorías, tiene evidentes ventajas nutritivas: es una fuente de vitaminas C y B9, también aporta cantidades significativas de fibra, vitamina A y magnesio.
Recientemente, algunos investigadores han demostrado que el brócoli poseen propiedades benéficas en la prevención de ciertos cánceres, gracias a diversos compuestos proporcionados en sinergia con las vitaminas antioxidantes (C y provitamina A), por lo que se sugiere el aumento de su consumo en todas sus formas: frescos, enlatados o congelados.

Algunos estudios han demostrado que el brócoli puede ayudar a envejecer mejor: el sulforafano, sustancia contenida en el mismo, ayuda a inhibir los genes responsables del envejecimiento de las células.

Al momento de adquirilo debe presentarse cerrado, muy compacto y de color muy vivo: no comprar brócolis florecidos o amarillentos, ya que no son frescos ni tiernos. Las hojas deben tener un intenso color verde y los tallos deben estar cerradas.

Valor nutricional por cada 100 gr.

Energía 23
Fibra dietética 2.4 gramos
Caroteno Beta
Proteína 2.3 gramos
Carbohidratos 4.3 miligramos
Vitamina C 49 miligramos
Ácido Fólico 53.3 miligramos
Calcio 89 miligramos
Hierro 0.9 miligramos