Confitura de calabaza y cardamomo

Cómo hacer Confitura de calabaza y cardamomo

Cortar la calabaza en rodajas finas y colocarla en un recipiente cubiertas con el azúcar. Dejar macerar toda la noche, tiempo durante el cual desprenderá líquido.

Poner entonces la calabaza con todo el líquido en una cacerola y cocinar hasta que esté tierna, junto con las semillas enteras de cardamomo. (Si la calabaza no liberó suficiente líquido, agregar un poco de agua).

Cuando la calabaza esté blanda, retirar las semillas de cardamomo y procesar la pulpa directamente en la misma cacerola, dejar que se cocine hasta la densidad deseada (recordar que caliente es más líquida que cuando está fría).

Envasar caliente en frascos bien limpios, cerrarlos muy bien cerrados con la tapa y apoyarlos boca abajo sobre un paño, hasta que se hayan enfriado por completo.

Nota: Verificar que se haya formado el vacío antes de guardar los frascos. En caso contrario, se pueden almacenarse en el refrigerador y consumir dentro de una semana.